Miles de ciudadanos salieron a las calles para manifestarse en contra del Real Decreto-Ley que fuera aprobado el año pasado y que limita el derecho a la salud de las personas inmigrantes las que deberán pagar para recibir asistencia médica o recibir la tarjeta sanitaria. Por ello el director de Amnistia Internacional en España, Esteban Beltrán expresó a la prensa que esta medida era "regresiva" y "discriminatoria" además de pedir que se modifique a la brevedad.