Luego de la derrota ante Sportivo, que derivó en la renuncia de Kudelka, el equipo conducido interinamente por la dupla Apuzzo - Rinaldi le ganó 2 a 1 a Atlético y vuelve a soñar con alcanzar una plaza de ascenso.
El panorama de Huracán era -o aún lo es- complicado de cara al objetivo que todos tienen en Parque Patricios: ascender a Primera División. La renuncia de Kudelka post derrota - aunque restan jugarse poco más de 30 minutos- y suspensión por incidentes del pasado sábado en el Ducó, parecían ser las última fotos de una ilusión que para muchos llegaba a su fin.
Néstor Apuzzo y Gabriel Rinaldi, coordinador de las inferiores y DT de la sexta división respectivamente; se hicieron cargo interinamente del equipo, mientras los dirigentes se pelean para elegir un conductor. En frente, Atlético Tucumán, hace rato asentado en la zona de los 5 ascensos, y en una ciudad que hace rato le era esquiva a los Quemeros.
Increíblemente al minuto de juego, el Pulga Rodríguez puso en ventaja a los tucumanos de tiro libre, tras una floja reacción del arquero Matías Giordano. Lo que parecía un golpe letal, le dio ánimo al Globo, que buscó impetuosamente el empate y lo consiguió, en los pies de Ramón Ábila a los 37 del primer tiempo.
A los 10 de la segunda mitad, Cristian Espinoza robó y asistió al mismo Ábila, que definió ante Calviño. Huracán lo daba vuelta merecidamente y pasaba a ganar 2 a 1. Pese a quedarse con uno menos por la expulsión de Erramuspe, el Globo se plantó bien en la cancha y aguantó el resultado sin sufrir sobresaltos.
Una victoria que golpea a la desilusión, que vuelve a hacer creer que todavía es posible y no todo está perdido. El camino es difícil, restan 5 finales. Tras el encuentro, el DT Néstor Apuzzo sostuvo: "Llegó la victoria en el momento justo, en el lugar justo. Este partido nos da la sensación que vamos a poder".
El Globo se prepara para recibir el lunes, a las 18:10, a Santamarina de Tandil en el Palacio a puertas cerradas.